Eclipse/Capítulo 1

“	Carrasquera movió las patas y se dió cuenta de que estaba retrocediendo. De repente, algo en su hermano hizo que se sintiera incómoda: el modo en que tensaba los músculos de los hombros, para parecer más poderoso que un segundo antes; la expresión distante de su mirada, como si pudiera ver más allá de esta, hasta algún lugar remoto donde podía enfrentarse a enemigos con una sola zarpa. La aprendiza recordó la forma en la que Leonino había convatido por la tribu, cómo había terminado la batalla, revolviéndose y cubierto de sangre -sangre que no era suya-, y dispuesto a seguir luchando hasta que no quedara un solo gato en pie.	„
—Carrasquera sobre su hermano en Eclipse, página 40

Eclipse
Información general
Capítulo:	Capítulo 1 (de 25)
Páginas:	31 - 40
Punto de vista:	Carrasquera
Cronología
Precedido por:	Prólogo
Sucedido por:	Capítulo 2

El siguiente artículo contiene información detallada del capítulo Capítulo 1 de Eclipse. Si estás buscando un resumen más corto del libro, por favor mira la cronología.

Resumen del capítulo

PdV de Carrasquera

Carrasquera se agazapa en una piedra, todavía calida por el calor del sol. La gata negra siente una brisa fría procedente de las montañas en su pelaje, y puede ver los campos verdes que hay más adelante. No puede esperar estar en casa, porque siente como si hubiera estado en la tribu por lunas. Carrasquera nota que la estación de la caída de la hoja se aproxima, debido al aroma mohoso que provenía de las hojas. Mira sobre su hombro y ve a Zarzoso con Esquiruela hablando con Borrascoso y Rivera en voz baja. Corvino Plumoso y Trigueña los acompañan, y ella se pregunta si se están despidiendo.

Ella está todavía conmocionada por la decisión de Borrascoso y Rivera de no regresar con ellos. Carrasquera recuerda la noche anterior, en donde Borrascoso anunció que él y Rivera acompañarían a los gatos de clan hasta el pie de las montañas, pero no más allá. Carrasquera recuerda como Glayino solo asintió, como si ya hubiera sabido desde antes de que ellos no iban a regresar. Se da cuenta que Rivera ama mucho su hogar, y Borrascoso la seguirá donde sea que ella vaya. Un destello de plumaje marrón la saca de sus pensamientos, y ella ve un águila. El águila plega las alas, y rápidamente atrapa a una liebre. Carrasquera envidia al águila por un momento, viendo lo rápida que es, y se imagina a si misma surcando por los aires.

Leonino irrumpe sus pensamientos, impacientemente esperando a que continúen. El macho trepa el peñasco donde está Carrasquera, maullando que desea tener algo que comer. Carrasquera murmura si alguna vez podrán volar, pero Leonino la mira como si estuviera loca. Ella se apresura a explicar pero Leonino sigue pensando que está loca. Carrasquera dice que como tienen el poder de las estrellas en las manos, cualquier cosa puede suceder. Discuten por ello, con el macho insistiendo que gatos voladores es una tonta idea. Carrasquera se siente avergonzada, acusando a su hermano de no tener imaginación, y que deje de reirse de ella. Le dice que no se lo está tomando en serio, pero Leonino le responde que están bien las visiones de Glayino, pero necesitan vivir en el mundo real. Carrasquera continúa, comentando que necesitan descubrir qué significa la profecía. Leonino no está de acuerdo, preguntándose si gatos con más poder que el Clan Estelar necesitan del código guerrero.

Glayino interrumpe su conversación, siseando que tal vez deberían hablar un poco más alto, porque puede que haya un gato del grupo que no los haya escuchado. Carrasquera se da la vuelta para asegurarse de que nadie haya escuchado su conversación, pero los otros gatos seguían platicando. Glayino les advierte que tengan cuidado con la profecía, porque es un secreto. Leonino trata de tranquilizar los temores de su hermano, pero el aprendiz de curandero insiste en que sean precavidos. El macho ciego pregunta qué pasaría si se revelara la profecía, y sus hermanos responden que nadie les creería. Glayino afirma que todo el mundo lo creería, y no les gustaría. Carrasquera se sorprende, preguntando por qué sus compañeros no estarían bien con que ella tenga poderes. Leonino expresa lo mismo, pero el aprendiz de curandero les aclara que la profecía no va de ser un buen guerrero; sino sobre ser más poderosos que el Clan Estelar. Carrasquera comienza a decir que su don es para todo el clan, pero es callada por Glayino.

Esquiruela se acerca a ellos, preguntando el por qué están riñendo. Glayino miente que sus hermanos estaban discutiendo sobre quien era mejor cazador, y Carrasquera se tiene que detener a si misma de objetar. Odia mentir, pero sabe que no puede revelar su secreto. Esquiruela los regaña por quedarse ahí parados platicando, ya que tienen que conseguir carne fresca para que Rivera y Borrascoso se la lleven a la tribu. Carrasquera se da cuenta que, durante su discución, no escucharon la orden. Esquiruela les maulla que espera que no tenga que decirlos dos veces, y los apresura. Luego la gata se dirige a Glayino, pidiéndole que revise la almohadilla de Trigueña, porque se hizo daño con una piedra. Carrasquera supone que Esquiruela solo está tratando de encontrar algo útil que pueda hacer su hermano, pero el macho la sigue obedientemente. Se siente amada por su madre, pero se pregunta si la profecía cambiará eso. Leonino le pregunta a Carrasquera qué le pasa, pero ella sólo le dice que deberían cazar.

Carrasquera camina hacia la orilla del peñasco, y salta hacia abajo. Sin embargo, al aterrizar, Ventolino choca con ella. Sorrpendida, la gata negra se levanta, lista para defenderse. Se da cuenta de quien es, y el macho le pregunta por qué interrumpió su cacería. Carrasquera comienza a disculparse, pero luego le cuestiona si es en ese lugar donde deben de cazar. Ventolino le replica que él escoge donde cazar, y comenta que al menos él está ayudando y no está charlando. Carrasquera le espeta que sus compañeros de guarida no hablarían con él aún si estuvieran ahí, pero se siente culpable al instante por lo mal que lo trata su padre. Leonino le pregunta a Carrasquera si está bien, y Ventolino le responde que por supuesto, y que estaría mejor si estuviera cazando, para que así puedan ir a casa. Carrasquera reflexiona en lo miserable que ha estado el macho del Clan del Viento, debido a la frialdad de su padre, y le dice que pronto regresarán. Ventolino pregunta por qué la tirbu necesita que cacen por ellos, y la compasión de Carrasquera se evapora.

Leonino pone los ojos en blanco, diciéndole a Ventolino que vaya a cazar un conejo. El macho negro se aleja, maullando que por qué los gatos del Clan del Trueno se creen tan especiales. Leonino murmura que desearía tener el poder de cerrarle la boca, y Carrasquera le pregunta si realmente es eso lo que desea. La gata persiste en que el poder de las estrellas podría permitirles hacer lo que sea, y que él debió haberlo pensado. Leonino se encoge de hombros, comentando que nunca lo hizo, pero que le gustaría ganar todas las batallas. Carrasquera desea saber cosas que otros no saben, y poder entenderlo. Leonino no sabe a lo que se refiere, pero sugiere que el poder les llegará de diferentes maneras, como la capacidad de leer mentes de Glayino. El macho continúa diciendo que ningún otro curandero puede hacerlo, y que Glayino también puede hacer predicciones del futuro. Carrasquera comenta que él es el menos ciego de todos.

Leonino se dirige a Carrasquera, recordando como en las montañas, se sintió extraño. El aprendiz cuenta como sintió el poder de hacer lo que sea, pero su hermana retrocede. Carrasquera teme la expresión del rostro de su hermano, sabiendo que es la misma durante la batalla en la tribu. Recuerda como estaba cubierto de sangre después de la pelea, pero no era de él. El fuego en sus ojos hizo que temblara, y Carrasquera se pregunta si podía temerle a su propio hermano.

Personajes

Principales

• Carrasquera
• Leonino

Secundarios

• Zarzoso
• Esquiruela
• Borrascoso
• Rivera
• Trigueña
• Corvino Plumoso
• Glayino
• Ventolino

Lugares

• Lejos de las montañas, pero en el territorio de la Tribu de las Aguas Rápidas