El bosque de los secretos/Capítulo 17

“	[...] Corazón de Fuego supo con total certeza que el lugarteniente había intentado matarlo. En esa ocasión había fallado, pero ¿qué ocurriría en la siguiente? [...] se espantó por la respuesta más que obvia: la próxima vez, Garra de Tigre se aseguraría de no fallar.	„
—Narrador sobre Corazón de Fuego y Garra de Tigre en El bosque de los secretos, página 164

El bosque de los secretos
Información general
Capítulo:	17 (de 30)
Páginas:	162-168
Punto de vista:	Corazón de Fuego
Cronología
Precedido por:	Capítulo 16
Sucedido por:	Capítulo 18

El siguiente artículo contiene información detallada del capítulo 17 de El bosque de los secretos. Si estás buscando un resumen más corto del libro, por favor mira la cronología.

Resumen del capítulo

PdV de Corazón de Fuego

Corazón de Fuego se debate en las aguas del arroyo, aún aferrado a la rama, que, arrastrada por la corriente, da vueltas en un torbellino confuso. El guerrero intenta sacar la cabeza del agua varias veces, apenas llegando a tomar aire, y aún sin querer soltar lo que queda de la rama, ya que, si queda en pos de la corriente, no será capaz de nadar y se ahogará. Cuando al joven le queda muy poca energía para resistir ante las arremolinantes aguas, la rama a la que se está aferrando se queda atascada en un extremo, contra una roca que sobresale del arroyo. A duras penas, Corazón de Fuego logra entrever a Rabo Largo, que se está acercando a él, apremiándolo para que se mueva. El guerrero atigrado se coloca junto a la roca, mientras su compañero intenta avanzar con un último esfuerzo por la rama hasta él. De pronto, ésta vuelve a ser arrastrada por el agua, justo cuando Corazón de Fuego salta hacia la roca. Sus patas resbalan, y el joven se ve a sí mismo cayendo nuevamente; pero esta vez, Rabo Largo se inclina y lo sujeta con los dientes, logrando salvarlo y ayudándolo a subir a lo alto. Corazón de Fuego se aleja del arroyo, tosiendo agua y resollando, agotado.

Agradece a su rescatador, quien permanece inexpresivo. Garra de Tigre los alcanza corriendo, preguntando al joven rojizo si se halla bien. Contemplando al tembloroso y mojado guerrero, el lugarteniente declara que será mejor que todos vuelvan al campamento, ya que Corazón de Fuego ha demostrado que por allí no se puede cruzar para llegar a los Cuatro Árboles. Muerto de frío y cansancio, el gato rojizo sigue a sus compañeros en silencio de vuelta a través del bosque. Invadido por el temor y la desconfianza, Corazón de Fuego resuelve para sus adentros que nadie habría obviado lo peligroso que era aquél cruce como para obligarlo a pasar por allí sin más. El joven sospecha que Garra de Tigre soltó la rama a propósito para que él cayera deliberadamente al arroyo, aunque se dice que el lugarteniente no haría tal cosa si Rabo Largo estaba mirando, ya que, por poco agradable que fuera, el guerrero claro le salvó la vida ateniéndose estrictamente al código guerrero. Aún así, Corazón de Fuego se dice que a lo mejor, Garra de Tigre aprovechó algún momento en que Rabo Largo no estuviera viendo o estuviese confundido. Desea preguntar al guerrero claro qué fue lo que pasó, pero sabe que no puede hacerlo sin que Garra de Tigre se entere. Receloso, el gato rojizo cruza una mirada con el lugarteniente, y en ese mismo instante, el atigrado oscuro entrecierra los ojos en un gesto de odio, como si lo estuviera amenazando en silencio. Corazón de Fuego comprende de pronto lo cerca que aquél gato estuvo de matarlo; y, horrorizado, concluye que la próxima vez, Garra de Tigre se asegurará de no fallar en su cometido.

Al llegar al campamento, Tormenta de Arena ve lo agotado que parece y se acerca a su lado, comentando que tiene un aspecto terrible. Cuando el joven intenta explicarse, Garra de Tigre lo corta, comentando que a Corazón de Fuego se le dio por nadar un poco. Los tres se dirigen a la Peña Alta ante Estrella Azul, mientras Tormenta de Arena ayuda a su amigo dándole apoyo. La líder pregunta qué ha ocurrido, y si han encontrado sitio por donde cruzar; y el lugarteniente explica que las aguas están demasiado altas como para pasar, describiendo que Corazón de Fuego, valiente pero insensatamente, intentó cruzar el arroyo que corre por el bosque a través de una rama, la cual se cayó a la corriente. Furioso, Corazón de Fuego se traga para sus adentros el hecho de que, como Garra de Tigre sabe muy bien, él no tuvo ninguna elección a la hora de pasar por aquella rama. Estrella Azul le dice que tenga más cuidado en un futuro, y le ordena ir a la guarida de Fauces Amarillas para que lo revise. Tormenta de Arena promete esperarlo en la guarida de los guerreros con algo de comer, y el joven se aleja con pasos tambaleantes.

En la guarida de la curandera, la vieja gata y Carbonilla, salen a su encuentro, y se dedican a escuchar su historia. Carbonilla se ve muy alterada por el hecho de que su antiguo mentor y amigo haya estado a punto de morir ahogado; y, al verla, Corazón de Fuego no puede evitar pensar en que, además del asesinato de Cola Roja, la pata herida de la gata es consecuencia de la ambición de Garra de Tigre. Fauces Amarillas ordena a Carbonilla revisar al guerrero, preguntándole qué deben hacer cuando un gato se da un remojón. Habiendo aprendido de la curandera, la joven gris revisa a Corazón de Fuego, y, al encontrarlo bien, informa a Fauces Amarillas. La vieja gata manda a Corazón de Fuego a dormir, y Carbonilla pregunta, confundida, si ella no va a revisarlo. La curandera le responde que confía en su criterio, y, tras una pausa, le explica que es un placer estar con ella, una gata con sentido común que aprende rápido y es buena con los gatos enfermos. A modo de propuesta, pregunta a la joven qué le parecería que la tome como su aprendiza para convertirse, algún día, en la próxima curandera del Clan del Trueno.

Ilusionada y sorprendida por la propuesta, Carbonilla responde que sí, aceptando el puesto con entusiasmo. Corazón de Fuego también se ve feliz, ya que le había apenado mucho cuando su antigua aprendiza sufrió el accidente; y luego cuando la gata se dio cuenta de que ya no podría ser guerrera gracias a su pata herida. El gato rojizo se dice que, gracias a que Fauces Amarillas integró a Carbonilla y le encontró utilidad dentro del clan, le ofreció un futuro definido del que no tendría que preocuparse; siendo aquella nueva felicidad de Carbonilla mucho más de lo que Corazón de Fuego habría podido esperar para su amiga. Contento, regresa a la guarida de los guerreros para comer junto a Tormenta de Arena, y luego queda dormido hasta el anochecer, cuando Látigo Gris lo despierta tras haber descansado el resto del día, para comunicarle que Estrella Azul está convocando una reunión.

Al salir al claro, el joven rojizo descubre a la líder y a la curandera sobre la Peña Alta, con Carbonilla a sus pies. Los demás gatos congregados escuchan a Fauces Amarillas anunciar que ha decidido tomar como aprendiza a Carbonilla para que sea la próxima curandera del Clan del Trueno, y la joven gata es recibida con vítores. Estrella Azul pregunta a la aludida si acepta el puesto, y ésta responde formalmente que sí. La líder entonces explica que Carbonilla tendrá que ir a la Boca Materna para ser presentada ante el Clan Estelar y ser aceptada y reconocida por los espíritus de los antepasados, y también los demás curanderos. Fauces Amarillas baja de la roca para chocar narices con su nueva aprendiza oficial, y el resto del clan se acerca a felicitarla, como su hermano Fronde e incluso Garra de Tigre. Mientras espera su turno para saludar a Carbonilla, Corazón de Fuego piensa en cómo desearía que todos sus problemas se resolvieran fácilmente.

Personajes

Principales

• Corazón de Fuego

Secundarios

• Rabo Largo
• Garra de Tigre
• Tormenta de Arena
• Estrella Azul
• Fauces Amarillas
• Carbonilla
• Látigo Gris

Mencionados

• Gatos del Clan Estelar
• Gatos del Clan del Trueno
• Guerreros del Clan del Trueno
• Gatos del Clan del Viento (sin nombrar)
• Gatos del Clan de la Sombra (sin nombrar)
• Gatos del Clan del Río (sin nombrar)
• Cola Roja
• Gatos
• Curandero
• Otro curandero
• Otro curandero
• Fronde

Eventos

Otros

• Carbonilla acepta formalmente convertirse en la aprendiza de Fauces Amarillas.

Lugares

• Arroyo
• Bosque del Ciervo Blanco
• Campamento del Clan del Trueno

Errores

• El arroyo del Clan del Trueno es erróneamente llamado un río.
• Se utiliza la expresión "con los ojos como platos", si bien se desconoce si ésta es muy apropiada para los gatos.
• La guarida de los guerreros es llamada "dormitorio", si bien esta expresión no es muy adecuada para los gatos.
• Se dice que Carbonilla debe viajar a la Boca Materna para la media luna. Si bien se confirma más adelante que, efectivamente, Carbonilla realizó el viaje aproximadamente casi media luna después de los sucesos de este capítulo; a partir de esta mención es incierto en qué tiempo exacto suceden las reuniones de curanderos.
  • Se hace énfasis a lo largo de la serie que estas reuniones se realizan cada media luna, pero no se especifica si esto significa "cada vez que transcurre media luna de tiempo" o "cada vez que hay una media luna en el cielo"; o ambas opciones. Esta confusión deja en duda si las reuniones de curanderos caen en correspondencia con las Asambleas (cuando hay luna llena y cuando hay luna nueva en el cielo), o si no se corresponden con las Asambleas (cuando hay media luna creciente y cuando hay media luna menguante en el cielo).
  • A su vez, también se sugiere en libros posteriores que las reuniones de curanderos suceden una vez por luna en vez de dos; y que se dan transcurrida media luna de tiempo desde la Asamblea de luna llena (es decir, que las reuniones de curanderos se dan cuando hay luna nueva). Sin embargo, suelen llamarlas como "reuniones de media luna" en vez de reuniones de luna nueva, salvo alguna que otra excepción. Otras veces, se menciona que la reunión de curanderos sólo se da cuando hay una media luna en el cielo, pero como si esto transcurriera una vez por luna en vez de dos.
    • Esto es inconsistente entre libros, ya que si se tiene en cuenta el caso de Carbonilla, siendo la primera vez que se menciona la reunión de curanderos; su introducción como aprendiza de curandera transcurre cuando en el cielo hay media luna (es decir, cuando ha transcurrido aproximadamente un cuarto de luna desde la última Asamblea), y no cuando hay luna nueva.